No son dudas

No son dudas lo que siento respecto a ti, sé lo que siento y lo que he sentido, lo que representas en mi vida y lo que me gustaría que representaras en un futuro.

La incertidumbre que me hace pensar en que tú ves la situación que tenemos de otra forma.

La seriedad que muestra tu cara, y en algunos momentos un silencio que quizás no haya interpretado bien, pero que me hace sentir que yo voy por un camino y tú por otro.

No sé sentir de otro modo y cuando siento que algo se rompe porque sólo puede ser expresado con restricciones, sólo puede ser disfrutado en el momento e ilusionarme  con algo que parece que no ha sido en serio sino sólo un juego, entonces me produce dolor de sentir lo que siento.

Un juego de palabras, qué peligro, porque la niña que hay en mi creía en ese juego, porque presiento que el disfrutar del momento es porque sólo es eso, disfrutar del momento y como si supieras que no  habrá nada más.

Es verdad que no se sabe nada, ¿pero por eso no se puede decir nada del futuro?  No depende de nosotros o quizás algo dependa, somos los que lo formamos.

Dolor de querer y que no te quieran de buena manera, dolor de sentir y que el otro no sienta, dolor de que se dice una cosa y el otro calla o te dice una mala palabra, dolor de sentirme apartada de sentirme ignorada e insultada, de sentirme sola y acompañada, de dar tanto amor, besos y caricias y que el otro vaya de  sobrao, de todo eso tengo miedo. No es que tú hayas hecho algo. Es que soy yo la que ha pasado por ahí y no quiero dar tanto ni imaginarme algo que no es. Soy soñadora, lo siento.

Quizás pida demasiado, pero en este caso sólo me lo pido a mí misma.

Y no me arrepiento de haber empezado esto contigo, lo volvería a hacer, lo único que no me gusta es ser  tan efusiva en mis sentimientos, no poder ver las cosas como las ves tú y pensar de otra forma. Ya no sé si hago bien en escribir esto y mandártelo. Lo único que deseo es poder disfrutar el momento contigo y no pensar más, ni soñar ni imaginarme lo que no es.